Segunda entrada del día!!!!
Aunque el tema de esta entrada va a ser diferente al que me hubiera gustado hablar en un principio.
El día 18 de junio me trasladaba a Toledo a disputar el Campeonato Regional en pista de Castilla La-Mancha en la prueba de 5 km marcha.
¿Las pretensiones de esta prueba? Acabarla y que fuera otro paso más para ir poco a poco siendo el que era antes, no importaba el tiempo que hiciera. Pues bien, parece ser que para cualquier marchador que va a Toledo a hacer una prueba de pista, el mayor logro que puede conseguir es eso, acabarla. Y en este caso no pude ni conseguir ese objetivo, es decir, fui descalificado.
Llevo 11 años haciendo marcha atlética, muchas pruebas a mi espalda, he sido descalificado con esta tres veces. Y en las tres veces había jueces de Toledo. En especial un señor con barba de cuyo nombre no quiero acordarme que no hay carrera que no me haya sacado amonestación.
No fui el único descalificado. Luis Cambronero también fue descalificado, pero brutalmente, cuando apenas llevaba más de un kilómetro de carrera. Y Luis es de los que mejor marchan en Castilla La Mancha.
Acabaron únicamente José Ignacio Díaz Velázquez (recuerdos y ánimos en su preparación para Daegu) y un chaval, Jesús, que lleva poco tiempo haciendo marcha, y que también al pobre le sacaron dos amonestaciones casi nada más empezar y tuvo que acabar casi andando, porque si no también se lo cargan.
Yo suelo ser crítico conmigo mismo, y si lo voy haciendo mal, he arriesgado y acabo siendo descalificado, pues oye, lo asumo y para otra a entrenar y a hacer más técnica para poder ir más rápido sin hacer faltas.
Pero lo que me parece totalmente innecesario, es que te saquen la tarjeta y suba a la pizarra de inmediato, simplemente porque al juez le parece que vas un poco al límite. Pues bien, en Toledo funcionan así. No es que lo vayas haciendo mal, sino que si tu forma de marchar no le gusta al juez, pues tarjeta y marcha más bonito si no quieres que te la saque. Y ya da igual que vayas marchando legalmente y exagerando el gesto de marchar, que no tienes nada que hacer.
Además da igual que vayas a 6 minutos el kilómetro y haciendo un rodaje lento, que vas a ir fuera. Y ESO QUE SOLO COMPETÍAMOS 4!!! Y creo que la carrera era para que hubiéramos acabado los cuatro (ver fotos de la prueba, que creo que en ninguna lo vamos haciendo tan mal).
A todo marchador le fastidia que lo descalifiquen, pero creo que yendo despacio como iba solamente para acabar, no se suele hacer faltas. Y menos que vaya haciendo faltas de bote como me sacaron. Vamos que ya no es que lleve un pie siempre en el suelo, sino que con los kilos que tengo de más hay veces que me cuesta levantar los dos. Ironía a parte, creo que se equivocaron. Sobre todo porque compitiendo 4 con mucha separación entre ellos y sin arriesgar ninguno de los cuatro, me parece que las faltas hay que sacarlas cuando realmente lo haga mal el marchador y no cuando "parezca" que lo hace mal porque el marchador tiene un poco de chepa como yo y estéticamente no soy muy bello.
Para marchar bien hay que entrenar mucho y hacer muchos ejercicios de técnica, pero creo que para ser juez de marcha hay que "entrenar" la vista y ver mucha marcha durante el año, y no solo en las cuatros carreras en las que se pueda juzgar.
Somos "libres de hablar y esclavos de nuestras palabras", y puede ser que se me coja manía por este artículo y ya no sea capaz de acabar una carrera en Toledo, porque me descalifiquen en todas. Pero creo que tiene que cambiar la actitud de estos jueces, porque somos pocos marchadores en Castilla La Mancha y si se sigue con estas actuaciones (también en otra prueba de marcha en Toledo el día 28 de mayo pasó lo mismo) los aficcionados que solo hacemos marcha porque nos gusta, acabaremos por no competir y dedicarnos a otros menesteres. O por lo menos dejaremos de competir en Toledo y competiremos en otras provincias donde haya jueces más competentes. Que esto no viene de ahora, viene de ya muchos años atrás.
Gracias a todo el que haya dedicado un tiempo a leer estas parrafadas, pero es que tenía que desahogarme. Puede que esté equivocado, pero no suelo hablar por hablar, y si lo he hecho sobre este tema, es porque me parece que hacía falta.
Un saludo a todos y hasta la próxima entrada.
P.D.: Si se va a sacar una tarjeta roja a un marchador no hace falta escondérsela y sacarla cuando estás al lado del atleta. Los atletas nos damos cuenta de que el juez lleva la tarjeta. El teatro en este caso es innecesario.